Lo que empezó siendo para seis personas y un día cualquiera se ha convertido en una reunión semanal de unas 15 personas.
El día elegido fue el viernes por eso de que no teníamos ninguno clase por la tarde y todos podríamos.
Llevamos ya dos meses comiendo los viernes las lentejas de Carlos y esto no tiene pinta de poder acabarse. De hecho el primer viernes que no haya lentejas será un gran bajón para todos. Y es que ya no es sólo que estén buenísimas sino que es una excusa para ver a la gente que durante la semana no has visto.
Aquí alguna de las fotos que hizo JuanPa del pasado viernes:
Mi comida preferida siempre fueron las lentejas de mi madre pero las de Carlillos están igual de buenas o mejores.
Desde aquí darle las gracias a Carlos por cocinarnos todos los viernes, cada vez llenando más y más la olla. Y esto parece ser que va creciendo....
Yo realmente no se que haría sin tí Carlillos!! ( y no solo por las lentejas :P)
¡¡Ay que ricas están las lentejicas madre!! Jejejejeje. Así no me extraña que lo estés pasando tan bien, si vives mejor que una reina.
ResponderEliminarUn beso
Qué bien vivís :)
ResponderEliminarQué bien vivís! :p
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